A pesar de que el Gobierno y Ecopetrol ya dan por sentado que la operación por la venta del 51,4% que tiene el Estado en ISA, será para la petrolera, en los últimos días han surgido una serie de inquietudes sobre la forma como se va a realizar esta transacción.
Las principales dudas de esta operación, que le puede representar al Gobierno cerca de $14 billones ante la necesidad de recursos, se dirigen al modo de la operación que se haría entre las dos empresas y por qué se va a realizar un contrato de exclusividad bajo el supuesto “convenio interadministrativo”.
En el medio también están los temores de algunos economistas en el sentido de que esta operación podría afectar el perfil corporativo de las dos empresas públicas.
Precisamente en una reciente carta de la Contraloría General de la República al ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, se preguntaba, ¿para qué entrar a participar el Grupo de Energía de Bogotá o cualquier otro, si ya lo tenían decidido?
Lo cierto es que la Contraloría ya visitó a Ecopetrol para conocer cómo es el proceso de estructuración del negocio, de dónde saldrá el dinero para adquirir ISA sin que se afecten las finanzas de Ecopetrol y mucho más.
Paralelamente, la Contraloría inicia un proceso de auditoría a ISA para establecer sus condiciones financieras, sus activos estratégicos y además determinar su valor.
Preguntas
Adicionalmente, el ente de control, le solicitó al ministro de Hacienda explicar la carta que envió a Ecopetrol, aceptando el negocio y le preguntaba “¿Por qué exclusividad?, ¿Cómo se está haciendo la maximización del valor de ISA?” y muchas más preguntas. En fin, si ya tenían el negocio listo con Ecopetrol, ¿podrán los demás hacer su oferta? ¿Y qué sentido tiene que lo hagan? Ojalá estén haciendo lo correcto, pues la ley, según los expertos consultados, dicen que debe haber una puja y no dar privilegios a ningún oferente y salga esto bien para el país.
En un reciente análisis, el exministro Germán Vargas Lleras, sostiene que “tengo el mejor concepto del presidente de Ecopetrol, Felipe Bayón. Difícil encontrar a alguien más preparado, con mayor experiencia y visión. Está jugado con esta aventura de ISA. No sé si por obligación o por convicción, pero lo cierto es que eso de meter a Ecopetrol en el negocio de transporte de energía eléctrica y en la construcción y operación de carreteras en Latinoamérica no figuraba en el plan de desarrollo de la empresa”.
Por su parte, el economista Michel Janna, en un análisis explicaba en La República, las dudas sobre esta operación. Sostenía que “los inconvenientes vienen por el lado de que esta operación deja el sabor de ser un matrimonio forzado. Ecopetrol nunca había anunciado su interés por invertir en activos de transmisión eléctrica en ninguno de sus planes de inversiones. Es cierto que la oportunidad de comprar ISA no estaba disponible antes, pero también es cierto que la compra de un activo de transmisión regulado es una desviación de lo que la industria extractiva ha denominado como “transición energética”.