Para la firma de este convenio, que asciende a los $1.000 millones, la Gobernación de Cundinamarca, a través del Instituto Departamental de Cultura y Turismo (Idecut), aportará $650 millones, mientras que los $350 millones restantes serán gestionados a través de recursos propios del municipio.
“En el año 2017 se presentó un proyecto de estudios y diseños para la Capilla San Martín en la convocatoria de Recursos IVA, que abre la Gobernación de Cundinamarca, a través de la cual se asignan los dineros del impuesto nacional al consumo para destinar a temas relacionados con el patrimonio cultural. El municipio de Funza salió favorecido y, posteriormente, a esa selección planteamos lo que sería la intervención del lugar”, explicó Jairo Guáqueta, coordinador del área de patrimonio del Centro Cultural Bacatá (CCB).
El templo, que está en titularidad de la arquidiócesis de Facatativá, se convirtió desde el año 2000 en un bien de conservación, según el inventario realizado para el PBOT del mismo año. Su importancia histórica, no solo está otorgada por el valor espiritual y cultural que tiene para la comunidad, sino por sus características arquitectónicas poco comunes, actualmente, en los contextos urbanos de Sabana Occidente.
“Este proyecto tiene un componente importante y es el histórico; en los estudios que se realizaron para la restauración del templo, se pudo determinar que este data del año 1792 a 1794, esto según el trabajo de investigación que hizo el taller del arquitecto Edgardo Bassi, Premio Nacional de Arquitectura, quien tuvo a cargo los diseños para la intervención del inmueble”, comentó Alejandro Angarita, asesor del Taller de Espacio Público de la Alcaldía de Funza.
Sumado al consultor, encargado de ejecutar la obra, las Secretarías de Planeación e Infraestructura y el CCB estarán delegados para acompañar y supervisar todo el proceso.
Una intervención integral
“La construcción presenta deterioros estructurales que requieren la intervención prioritaria, entre ellos las patologías causadas por humedades en la cubierta. También se observan dilataciones en muros hechos en adobe con espesores de hasta 50 centímetros, razón por la cual se debe realizar la restauración para evitar daños mayores que pongan en riesgo la estabilidad del lugar”, explicó Danilo Araujo, ingeniero de la Secretaría de Infraestructura.
El inicio de la obra se proyecta para el primer trimestre del próximo año. Dentro de las actividades que se realizarán están: desmonte, retiro y demolición de la placa piso, baldosa piso, placa de andenes exteriores, cielorrasos, cubiertas y ventanas de madera. También se llevará a cabo el reforzamiento estructural y la instalación de una nueva cubierta, entre otras adecuaciones, que comprenden los baños, pisos y alumbrado.
Información: Alcaldía de Funza.